Los dos mandamientos

Los dos mandamientos

Consultado Jesus acerca del más importante mandamiento, contesto:

“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.”

En resumen: amar a Dios y amar al prójimo.

Para claridad debemos traer a la memoria que en otra parte Jesus se refirió a cumplir los 10 mandamientos de la ley, y surge una pregunta para muchos: ¿son dos o son diez?  veamos la cita:

Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

Notemos que en esta ocasión Jesus no solo menciona los diez mandamientos, sino que agrega; Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

En síntesis, los diez mandamientos son válidos y se resumen en dos: amar a Dios y amar al prójimo.

Los dos mandamientos resumen toda la ley de Moisés y además a los profetas.

He leído a muchos expresar la frase: Yo amo a Dios. Y me pregunto, sabrán ellos lo que significa amar a Dios? Creo que hay mucha confusión acerca de este tema y es más, creo que tampoco se está amando a dios por desconocimiento.

El problema surge después que por varios siglos se ha venido deteriorando el concepto del amor y se ha concretado a una relación del tipo sentimental y hasta atractivo físico.

El hecho que Dios es invisible a los ojos humanos, el atractivo se evapora de inmediato, nadie puede amar a alguien o a algo que no ve. Aquí surge la necesidad de elaborar ídolos que representen a Dios y poder tocarlos. cosa que Dios rechaza contundentemente cuando dice en uno de sus mandamientos: Éxodo 20:3 No tendrás dioses ajenos delante de mí.

Para entender mejor la palabra “amar” la vamos a sustituir por las palabras “dar y servir” que es lo que más se parece con el amor. Entonces tendremos más claridad con Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Y podremos decir servirás a tu prójimo como a ti mismo. En esta forma será más fácil que entendamos y que obedezcamos. Veamos si calza esto con lo otro: “servirás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.” Entonces tendremos más claro que es que debemos servir a Dios, también que debemos servir al prójimo, y así se desaparece esa muralla de lo prohibido que es amar al prójimo.

Si servimos al prójimo, estamos agradando a Dios y nos estamos salvando de la condenación.

Este asunto de amar al prójimo es altamente importante para nuestra seguridad, Dios esta muy interesado en conocer a cada instante cual es nuestra relación con el prójimo, y no solo eso, Dios utilizara este concepto para calificarnos si vamos al cielo o al infierno, si hemos amado al prójimo iremos con seguridad al cielo, pero si no lo hemos amado, iremos al infierno.

Como Dios derramo su espíritu sobre toda carne, lógicamente que todo ser humano tiene el espíritu de Dios en su corazón y algunos no le reciben, pero otros si, los que son llamados hijos de Dios.

Joel 2:28  Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne,

Confirmado en Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.

Servir al prójimo en la misma forma que nos servimos a nosotros mismos. Ese es el mandamiento: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Que hace usted con sus necesidades? las satisface lógicamente hasta donde sea posible, ejemplo, tiene hambre, come, tiene sed, bebe, tiene frio se arropa, esta enfermo busca alivio, está preso busca libertad, es extraño en la tierra busca abrigo, esa es la forma como usted se ama, (se sirve),entonces el deseo de Dios es que usted se vuelva un protector del prójimo, que le satisfaga hasta donde sea posible de sus necesidades.

Dios creo este método para salvarnos o condenarnos, de allí que sabiendo que Cristo vive en el corazón de cada uno, y que Cristo también sufre nuestras necesidades, Dios desea que cada uno de sus hijos actué inmediatamente ayudando al próximo.

Mateo 25:34-36  Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.

 

El que tenga ojos para ver que vea y el que tiene oídos para oír que oiga.

 

Por  Victor Manuel Castro Chinchilla